JESUS PROMOTOR DE VIDA Y LIBERADOR DEL PECADO.

Mt 8, 1-4
Si Dios, como aparece en la manifestación del Sinaí (Mc 12,27),es el autor de la Vida parece lógico pensar que también se implica en la conservacion, mejora y calidad de la vida por el generada. Es lo que vemos hoy con Jesus autoproclamado pan de vida(Jn 6,44-51) cuando en las primeras escenas de los relatos de sus prodigios nos descubre su relacion con los leprosos.
El leproso era socialmente estigmatizado porque era supuestamente pecador, era enfermo y además contagioso (se pensaba) y por ello tenía que vivir al margen de la sociedad.
Así que el leproso al sentirse “tocado ” por Jesús debió sentirse sanado radicalmente. Del pecado (si lo tenía), de la enfermedad y del aislamiento social.
Ahora que hemos pasado los estragos de la pandemia y estamos con la guerra sintonizamos mejor con la necesidad de afrontar muy unidos todos el problema mas basico y esencial de todos que es la salud . Sin ella ,baja enteros nuestro estar en el mundo . Vivimos, pero solo en parte.Y Jesus, el pan de vida , quiere que saquemos de nosotros todas nuestras potencialidades para vivir en plenitud. Y por ello con el leproso nos invita a vivir con el recurso de la fe que nos sana,reintegra y salva de toda suerte de mal pero no solo del que nos sobreviene sin culpa alguna por las limitaciones propias de la realidad material que somos y nos envuelve ,sino también de los males derivados del mal uso de nuestra libertad a lo que en el ambito religioso hemos llamado pecado. Nuestra contribución en la aceleracion del cambio climático con sus graves efectos para toda la humanidad nos deben despertar a una mayor conciencia colectiva para sentirnos responsables y cuidar de nuestro entorno con el espiritu de la “Laudato si” del Papa Francisco y su propuesta de ecologia integral incluso espiritual. Es la penitencia o satisfaccion que nos corresponde asumir tomando medidas extras de cuidados a nuestra tierra por la inconsciencia y libertino actuar en relacion con nuestra Casa Comun la que con el hiperconsumismo y practicas de producción aberrantes estamos sacrificando como el hijo prodigo que dilapidó su hacienda.
Dispongamonos ,pues ,a colaborar para paliar los males que nos sobrevengan

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