Mc 1,12 – 15
El domingo 1° de Cuaresma és una invitación a ir al desierto movidos por el Espiritu como Jesús . Instituciones religiosas y personas necesitamos escuchar la voz de Dios a ver si nos situamos mejor con bases renovadas ante este nuevo milenio.
Es necesario hacer una reflexion en profundidad en este cambio de época. Hemos de saber situar-nos politica y socialmente en forma adecuada ante un mundo en cambio. El reto es construir sobre roca en un mundo de arenas movedizas. Y entonces la pregunta és :¿què valor o fuente de valores puede constituirse hoy como Roca firme sobre la que construir el mundo cara al tercer milenio?
Todas las grandes religiones hasta hoy mismo
han dado cobertura y fundamento a sociedades y países configurandoles una identidad dentro del conjunto del mundo. Así ha sido con los países donde las religiones mayoritarias han marcado huellas profundas e indelebles bien perceptibles hasta constituir objetivos turisticos nada despreciables.
Pero ahora estamos en un tiempo de cruce de culturas. Un mundo globalizado. Y todas las señas de identidad que han configurado pueblos y han suministrado ideales al pueblo por los que luchar- hasta dar la vida si fuera necesario-, han de revisar su propio fundamento y asentarse sobre fundamentos más amplios e incluyentes para que abarquen a más humanidad y en mayor nivel de profundidad y diversidad.
Nosotros pensamos desde nuestro cristianismo católico que su sustrato más profundo y universal no es ella misma como Religión sino que es el Reino de Dios predicado en primera instancia por Jesús y luego por los apóstoles y discípulos que lo fueron testimoniando en iglesias sinodales desde los primeros tiempos. Y ese sustrato fundante y piedra viva es el propio Jesús el Hijo del Hombre manifestado en las Bienaventuranzas como expresion doctrinal y espejo de la propia vida y personalidad de Jesús. Ellas representan la veta más profunda y distintiva del Jesús que se despojó de su rango divino para encarnar en todo la naturaleza humana .
Y ese es el fundamento – pensamos que válido para todos- què cómo católicos y/o cristianos ofrecemos al mundo de hoy y por tanto:
1 . no nos vale la idea de Dios como fundamento de un orden mundial nuevo -si no se despoja de sus adherencias demasiado humanas y hasta pecaminosas.(abuso del nombre de Dios); dios patrocinador de guerras y de dictaduras etc..) .
- No es una religión concreta ya que las religiones son sólo medios para ese encuentro con Dios y ninguna puede arrogarse derecho alguno de adoración como única entidad “salvadora” sin pecar de idolatría. Solo Dios es Dios.
- Es el Reino que se hace presente en quienes viven las Bienaventuranzas y siguen su camino.
Es el Reino vivido y anunciado como Buena noticia por los que por amor al Reino se alinean con los pobres y desheredados. y ejercen compasion, y luchan por la justicia y la paz..hasta con riesgo de persecucion..Y ojalá la iglesia católica con espíritu mas inclusivo y universal -haciendo verdad este titulo de catolica( =universal)- nos gobierne con Sabiduria y nos lleve con los sacramentos por caminos de santificación y de Paz y fraternidad a los que nos quiere llevar Francisco en la Tutti fratelli.
La Iglesia toda, pero también cada cristiano- tendremos que hacer nuestra cura de orgullo y aceptar un nivel mas bajo para que en ese nivel entremos todos sin que haya privilegiados……