Comentario homilético 25/7/18

Mt 20,20-28
Celebrando a Santiago apóstol el evangelio nos recuerda a la madre de los Zebedeos (Santiago y Juan) tb conocidos como los hijos del Trueno pidiendo a Jesus q sentara a sus dos hijos en su Reino uno a su derecha y otro a su izquierda.
Y Jesús pone a prueba a los aspirantes a su Reino indicándoles el calvario y muerte q van a tener q estar dispuestos a sufrir para llegar ahi. “Estamos dispuestos le contestan” . Jesús acepta el coraje que manifiestan los hermanos en la respuesta pero como maestro aún les da una recomendación q nos puede servir a todos los q pretenden escalar puestos de poder en la sociedad y tb en el Reino:
“los poderosos del mundo veis q oprimen a los súbditos . No sea así entre vosotros . El q quiera ser el primero q sea esclavo de todos como el Hijo del hombre q no ha venido a ser servido sino a servir y dar su vida en rescate por muchos.”
Así Jesús ha querido q entre los discípulos la ambición de poder y brillar -tan frecuente y que pierde a tanta gente- se transforme en aspiración de servicio humilde . Servicio q Jesús nos compara al grano de trigo q se entierra para q de fruto y fruto abundante.