LIBRANOS DEL MAL

Lc 4, 1-13
Somos y funcionamos por la vida como vehículos lanzados a toda velocidad y movidos por pura inercia instituciones y personas. Y la Cuaresma que iniciamos el pasado miércoles puede ser el tiempo oportuno para tomar conciencia de quienes somos, qué queremos, qué nos pasa y adonde queremos ir.
En el evangelio de hoy se nos presenta a un Jesús que antes de empezar su tarea de restauración y salvación del ser humano es llevado por el Espíritu al desierto durante 40 días.
Y la Iglesia nos propone también a todos nosotros 40 días antes de la Pascua para que nos dediquemos a las labores de revisión y puesta a punto de nuestro yo mas profundo y personal. No quiere que vivamos como autómatas llevados por la ola de las modas de los tiempos.
Nuestra Cuaresma, como la de Jesús ha de iniciarse con la mayor sencillez y verdad: “somos polvo y hemos de volver al polvo” se nos dice en la imposición de la ceniza del miércoles , asÍ que humildad sobre todo en este tiempo y ojalá siempre.
Luego , metidos como en el banco de pruebas y” alejados del mundanal ruido” (¿recordais los antiguos retiros espirituales?) tendremos que revisar nuestra relación
1.con Dios(=si lo siento y trato como a mi padre con confianza y amor o con miedo o con olvido….).
2. Nuestra relación con nosotros mismos (=si nos sentimos libres y liberados como Dios nos quiere y por tanto llenos de vitalidad y amor como para transmitir alegría y bondad o nos vemos con debilidades, apegos, malhumor, desánimo, desesperanza, poca autoestima etc…El clasico AYUNO de este tiempo nos habla de la necesidad de auto-control . Muchas fuerzas del maligno pueden haber hecho mella en nosotros y a lo mejor estamos viviendo “a lo que nos pida el cuerpo” con poco control sobre el consumismo ambiental, alcohol, tabaco,.. lujos, comidas, caprichos, coches, móviles etc…Y por último
3. hemos de poner a prueba nuestra relación con los prójimos familiares, amigos, colegas, vecinos etc teniendo presente que Jesús anda con preferencia entre los mas necesitados porque viene a liberarlos y son sus preferidos.
Y a lo mejor, después de este camino de Cuaresma hacia la Pascua descubrimos que el evangelio es sobre-todo un mensaje de liberación de todo mal que nos ha permitido liberarnos y ayudar a liberar a otros de las fuerzas del mal haciéndonos sentir mas auténticamente libres y liberados y por tanto Señores. .
Hoy tomamos conciencia de las palabras del Padre Nuestro ” y no nos dejes caer en la tentación, mas líbranos del mal”. Y reconoceremos que es la fuerza del Espíritu en nosotros -una vez mas- la que nos lleva por caminos de alegría y liberación aunque con no pocas fatigas.
Canto: “Cristo nos da la libertad”