LA INVOCACION NOS ACERCA LA VISION TRANSCENDENTE

Mt 9,27-31
Bon dia de pont pa gaudir desde el especial cristalí de la fe de una visió divina integral”.
De los ciegos como a los que Jesús cura hoy en el evangelio se habla más de 40 veces. Y es el primer argumento o signo para conocer a Jesús como el Mesías que tenía que venir: “los ciegos ven, .. los mudos hablan, los cojos andan…”
Pero junto al sentido literal de curar la falta de visión está el valor trascendente en el hecho de devolver la visión: descubrir a Aquel que se está haciendo presente en semejante prodigio:la luz cegadora del Infinito presente en nuestra realidad material caduca y terrestre. Esta presencia luminosa la manifestaba Jesus en si mismo cuando decía: “He venido para que los que no ven vean y los que creen ver no vean”(Jn 9,39. O también cuando decía : “te doy Gracias Padre porque has ocultado estas cosas a sabios y entendidos y las has revelado a los sencillos” Mt 11, 25-27. De esta forma Jesus nos está diciendo que
todo el seguimiento de Jesús es un ejercitar la visión para descubrir a Dios en la belleza del mundo, descubrir a Cristo en los pobres, descubrir al Padre viendo a Jesús como el Cristo y descubrir a los hombres como hermanos e hijos de Dios (aunque no lo parezcan a los ojos humanos.)
Es otro cristalino el que necesitamos para ver el mundo y al hombre como Dios Padre lo ve. Y alcanzar a verlo así es pura gracia de Dios con la cooperación de nuestra invocación que concentramos en la oración del Padre nuestro pidiendo que venga su Reino y nos de el pan de cada dia y el perdón.
Canto: Te damos gracias, Señor.