FIESTA DE LOS FIELES DIFUNTOS

Jn 6,37-40
Todavía conmocionados por los últimos acontecimientos luctuosos de la Dana recordábamos ayer a los grandes santos reconocidos por la Iglesia con santidad probada y la de tantos de vida anónima pero igualmente santa y digna de recuerdo . Y hoy vamos a recordar a todos nuestros difuntos.
Según nuestra tradición cristiana pediremos por ellos para que consigan la misma santidad de los santos una vez purificados. Es un día de esperanza y en cierto modo de gozo porque ponemos en las manos de Dios su salvación sabiendo que aún podemos interceder por ellos en un acto que no es solo de recuerdo sino de ferviente oración con efecto salvifico gracias a la celebración del sacrificio eucarístico o Santa misa que actualiza la muerte de Cristo por nosotros y que nos salva. Es momento también de agradecer a Dios por sus vidas que han dejado sin duda en nosotros profundas huellas y nos abriremos a la esperanza de poder compartir con ellos la eternidad. No es ,por tanto, una fiesta de muerte ,sino de vida esperanza y alegría.
Canto: Resucitó ,Al leluya”.